El proyecto, financiado por Manos Unidas, inició en febrero del 2007 y tuvo 8 meses de duración. Se basa en los avances logrados en MENUTRES (financiado por el Fondo de las Américas), en la misma población, aunque más focalizado en los niños más pequeños (< 2 años de edad) y en dos temas que resultaron muy importantes durante la primera intervención: anemia y parasitosis en niños.
En esta oportunidad nuevamente se busca el trabajo concertado, ahora en los hogares con las madres y en las instituciones educativas iniciales y de primaria, con la participación de los profesores articulados a los establecimientos de salud locales.